domingo, 27 de noviembre de 2016

Emboquillando una batalladora...

Una Crisol viejita llegó al taller con ganas de unos mimos.
Tenía la boquilla rota (se completó con poxi y se aseguró con un termocontraible para evitar posible rotura por mordedura), y se le realizó una boquilla en acrílico con un pequeño detalle en cobre.
Su dueño felíz... y vanidad mediante, yo también...